El bajo deseo con angustia es la disfunción sexual informada por mujeres con más frecuencia en un amplio estudio estadounidense
Uno de los mayores estudios realizados hasta la fecha sobre la disfunción sexual de las mujeres, el estudio PRESIDE, se llevó a cabo para comprender mejor los problemas sexuales informados por las mujeres, como el bajo deseo sexual, la baja excitación o las dificultades del orgasmo. El estudio consistió en una encuesta a mujeres estadounidenses, en la que se buscaba identificar a las que experimentaron algunos o todos estos problemas y comprender cuántas mujeres estaban angustiadas por ellos.
- Más de 30 000 mujeres respondieron al cuestionario
- El rango de edad de las participantes era de 18 a 102
- La edad media fue de 49 años
Los problemas sexuales se evaluaron en todas las encuestadas mediante preguntas estandarizadas, y la angustia personal asociada con el sexo se midió con el uso de una herramienta de evaluación científicamente validada.
Los problemas sexuales que informan las mujeres son frecuentes entre ellas
Casi la mitad de las participantes (44 %) admitieron tener al menos un problema sexual. El problema informado con más frecuencia fue el bajo deseo, seguido de dificultades en la excitación y en el orgasmo.
En general, las tasas de problemas sexuales aumentaron con la edad
En el caso de las mujeres del estudio, mientras más mayores fueran las participantes, mayor era la probabilidad de que informasen tener problemas sexuales.
La angustia por problemas sexuales fue más frecuente en mujeres jóvenes y de mediana edad
La angustia personal asociada con lo sexual estaba presente en aproximadamente una cuarta parte de las mujeres tanto de mediana edad como de menor edad, y luego se redujo a la mitad en las mujeres mayores de 65 años. Por tanto, a medida que las mujeres envejecían, tenían más probabilidades de presentar problemas sexuales; sin embargo, la angustia relacionada a estos mismos problemas disminuía.
Problemas sexuales + angustia personal
En general, el 12 % de las mujeres del estudio informaron tener angustia sexual asociada con al menos un problema sexual. Se observó la misma tendencia que en el caso de los problemas sexuales informados: la angustia estaba más asociada con un bajo deseo, seguido de la baja excitación y, luego, con dificultades para tener orgasmos.
¿Por qué las mujeres mayores tienen menos angustia?
Los posibles motivos de los bajos niveles de angustia a pesar de la alta prevalencia de problemas sexuales en las mujeres de edad avanzada podrían incluir la importancia de otros problemas médicos, cambios en el estado de la pareja y la función sexual, problemas de salud física de su pareja o el aumento de la importancia de otros factores en las relaciones duraderas. Esta sería una pregunta interesante que podría estudiarse en investigaciones futuras.
Resultados adicionales
Una tendencia interesante que se observó fuera de los resultados principales del estudio fue que las mujeres que sufrieron depresión tenían más del doble de probabilidades de informar tener problemas sexuales preocupantes que las que no la sufrieron. En otros estudios, se ha observado la relación entre la depresión y la disfunción sexual.
Conclusiones
Aunque las mujeres que informaron tener algún tipo de dificultad sexual constituían alrededor del 40 % de las participantes del estudio, los problemas sexuales asociados con la angustia personal fueron mucho menos frecuentes y, aproximadamente el 12 % de las mujeres, informaron tenerlo.
Artículo de referencia:
Shifren JL et al. (2008). Sexual problems and distress in United States women: prevalence and correlates. Obstet Gynecol. 112(5): 970-8.